El llamado octavo arte se basa en pintar con la luz. Un medio que busca la expresión de los reflejos, pero también de las sombras. La fotografía es la forma más pura de doblegar la realidad a nuestro ojo y a la vez la más accesible para crear mundos imposibles que cuestionen la verdad.
Cada día se hacen millones de fotografías alrededor del mundo, pero solo unas pocas merecen ser reconocidas como arte. Cualquier persona, con mayor o menor destreza, ha tratado de retratar su realidad, incluso hay quien consigue imprimir emoción en una fotografía, aunque tan solo sea cuestión de azar. Es por ello que debemos conocer la técnica para que todo lo fortuito se vuelva destreza y seamos capaces de domar la luz a nuestro interés. Por ello, diseccionamos técnicas como el contraluz, la doble exposición o la imagen a través de un prisma, dando ideas para fotos más originales.
Fotos a contraluz
Todos hemos intentado alguna vez crear divertidas siluetas de animales con la ayuda de una lámpara y una pared, y es que este el principio básico para entender una de las técnicas más expresivas y sencillas, el contraluz.
Una técnica utilizada a lo largo de la historia de la fotografía y dominada a la perfección por Henri Cartier-Bresson. Al igual que ocurre con su antecedente, las sombras chinescas, tan solo necesitamos un punto de luz y una silueta para crear imágenes singulares. A diferencia del resto de técnicas, en esta ocasión la luz no se sitúa frente al objeto fotografiado si no a su espalda. La figura se coloca entre el foco y la cámara, de tal modo que con el objetivo cegado tan solo nos queda una silueta perfilada en la composición.
Esta técnica, de fácil ejecución en un interior cerrado, puede ser igual de efectiva en un espacio abierto, tal y como ocurre con los eclipses solares, en los que La Tierra se sitúa entre el Sol y la Luna. Podemos valernos de su fuerza, sobretodo en el ocaso, para crear nuestras fotos a contraluz.
Fotos de doble exposición
Continuando con este viaje por las técnicas fotográficas, debemos hacer una parada en la doble exposición. Una técnica originalmente analógica que consiste en la superposición de dos imágenes diferentes. Su utilización nos ayudará a dar texturas y motivos originales a nuestras fotografías. A pesar de que no todas las cámaras digitales tienen esta opción, la podemos dominar mediante programas de edición de imagen. De este modo podremos coger una fotografía a contraluz y rellenar la silueta obtenida con cualquier tipo de textura que deseemos, siendo el paisaje de naturaleza una de las opciones más eficaces para realizar fotos a doble exposición.
Fotos a través de un prisma
Durante todo el artículo hemos hablamos sobre aquello que nuestro ojo puede ver, pero existen fórmulas que nos ayudarán a deformar la realidad. Así pues, abordaremos la imagen a través de un prisma. Esta es una técnica sencilla e intuitiva en la que tan solo necesitaremos un prisma de cristal para crear originales efectos lumínicos y de composición de la imagen. Colocando el prisma frente al objetivo podemos conseguir que los rayos de luz, natural o artificial, incidan en la lente para modificar el color, alargar o ensanchar las figuras fotografiadas, incluso crear iluminaciones imposibles.Estas son algunas ideas para fotos que harán que la calidad de nuestras tomas deje de ser aleatoria, pasando a ser el reflejo de nuestro modo de ver el mundo. A pesar de que requiere de gran trabajo y dedicación, está en nuestra mano (y nuestro ojo) llegar a doblegar la realidad. Aunque con paciencia, siempre hay luz al final de la fotografía.
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