Luces de posición de un coche

Luces de posición para una conducción segura

Ya hace más de dos décadas que la DGT prohibió circular empleando exclusivamente las luces de posición del coche. Y es que hasta entonces, estas luces podían utilizarse para circular de noche por las vías urbanas suficientemente iluminadas, prescindiendo de las hoy obligatorias luces de cruce o luces cortas.

La consecuencia directa de esa prohibición es que, a día de hoy, no son pocos los conductores que ignoran para qué sirve exactamente el alumbrado de posición y los casos en los que está permitido utilizarlo. Conque en las siguientes líneas vamos a aclarar cualquier duda a este respecto.

¿Cuáles son las luces de posición?

Las luces de posición, como ocurre con los intermitentes, no son más que unos elementos luminosos de señalización y aviso, puesto que su baja potencia no les permite proyectar suficiente luz sobre una vía mal iluminada.

Como su nombre indica, su principal función es la de advertir de la presencia de un vehículo y señalizar con claridad la posición del mismo. Además, estas luces deben permitir al resto de los conductores conocer en qué sentido de la marcha está dispuesto el vehículo que las lleva encendidas.

Conozcamos los tres tipos de luces de posición:

Luces de posición delanteras

Las luces de posición delanteras son dos lámparas de baja potencia lumínica que pueden estar situadas en:

  • Los interiores de de la óptica izquierda y de la óptica derecha del vehículo.
  • En dos pequeñas ópticas independientes, una a cada lado de la parrilla frontal del vehículo.

Esas dos lámparas delanteras no son suficientes para iluminar de noche la calzada y conducir con seguridad, pero en la oscuridad pueden ser percibidas por otros conductores desde cientos de metros de distancia.

Obligatoriamente han de ser de color blanco.

Luces de posición traseras

En los vehículos actuales, las luces de posición traseras están integradas en las ópticas posteriores del vehículo.

Obligatoriamente han de ser rojas. La obligatoriedad del color no es un ningún capricho: lo que se pretende con ello es que no puedan confundirse con ningún otro tipo de luz, al objeto de que los conductores sepan inequívocamente que corresponden a la parte trasera de un vehículo.

Además, deben ser antideslumbrantes pero detectables desde cientos de metros de distancia.

Luces de posición laterales

Estas luces de posición solo son obligatorias en los vehículos que miden más de seis metros de longitud. Su color ha de ser amarillo.

¿Y cuál es su utilidad? La principal es que los demás conductores puedan detectar a distancia a un vehículo largo, cuando este se encuentra en maniobrando para cruzar transversalmente una carretera en plena noche.

¿Cuándo se usan las luces de posición?

Señalamos que las luces de posición traseras y laterales permanecen encendidas siempre que esté activado cualquier tipo otro tipo de alumbrado, con la única excepción de las luces diurnas.

Respecto a las luces de posición delanteras, en algunos modelos sucede lo mismo pero en otros pueden apagarse automáticamente cuando se encienden las luces de cruce, las de carretera o las antiniebla.

Y entonces, ¿cuándo utilizar el mando del alumbrado para activarlas voluntariamente? Cuando detenemos o estacionamos el vehículo en la vía pública y concurre alguna de las siguientes circunstancias:

  • Es de noche y la vía no dispone de iluminación.
  • Es de noche y la vía está insuficientemente iluminada.
  • Las circunstancias climatológicas dificultan la visibilidad.

Hacemos hincapié en que el vehículo ha de estar completamente detenido, tanto con el motor encendido como apagado, pero el coche no puede estar en circulación. Es decir, no podemos emplear exclusivamente las luces de posición cuando, por ejemplo, estamos detenidos en un semáforo.

La excepción es que decidamos utilizar las luces de posición a modo de luces diurnas (si nuestro coche no las incorpora) o como complemento de estas (siempre antes de que caiga la noche).

Luces de estacionamiento: una alternativa al alumbrado de posición

Muchos conductores ni siquiera saben que la mayoría de los vehículos actuales disponen de la posibilidad de activar, de manera totalmente independiente y voluntaria, las luces de posición delanteras y traseras de un solo lado del vehículo. Es lo que se denomina alumbrado de estacionamiento.

La DGT también permite usar esas luces de estacionamiento, en lugar de las de posición, cuando el vehículo está estacionado o detenido fuera del flujo circulatorio. En ese caso, las luces de estacionamiento que han de activarse son las correspondientes al lado del vehículo que está más próximo a los carriles de circulación.

¿Y qué ventaja ofrece tiene el alumbrado de estacionamiento respecto del de posición? Pues que reduce el consumo eléctrico a la mitad, algo que resulta muy práctico si el vehículo va a estar estacionado durante muchas horas en una vía o lugar insuficientemente iluminado. También es una buena alternativa cuando la batería de nuestro coche presenta signos de agotamiento.

¿Cómo se encienden las luces de posición?

Ya hemos comentado que las luces de posición delanteras y laterales se activan automáticamente cuando se encienden las luces cortas, las de carretera y las de niebla.

También que en esos casos las delanteras, según el modelo, pueden permanecer encendidas o apagarse. En cualquier caso, eso no tiene relevancia: si está activada cualquier otra luz delantera, no son ni necesarias ni obligatorias.

Pero lo que si tiene relevancia es que todos los vehículos han de disponer de un mecanismo que permita encender todas las luces de posición, simultáneamente y de forma voluntaria.

Para activarlas manualmente se emplea la misma rueda o palanca que activa las luces de cruce. La gradación de la rueda o palanca que debe seleccionarse suele ser la previa o la posterior a la que activa las luces de cruce.

Además, no está permitido que se puedan encender únicamente las luces de posición delanteras o las traseras. Es decir, al activar las luces de posición se encenderán simultáneamente las dos luces delanteras y las dos traseras.

Y si lo que se pretende es encender las luces de estacionamiento con el fin de reducir el consumo eléctrico, el mecanismo de activación es diferente: estas luces no prenden si antes no se ha apagado el motor y desconectado el sistema de encendido.

Para activarlas, debe accionarse la palanca de intermitencias como si se fuera a poner el intermitente izquierdo o derecho, según la luz de estacionamiento que deseemos dejar puesta. Se encenderán las luces de posición delantera y trasera del lateral elegido.

En adición, las luces de estacionamiento se apagan automáticamente cuando se activa la puesta en marcha del coche.

Conclusión

La utilidad práctica de las luces de posición delanteras se reduce a los casos en los que el vehículo está detenido y fuera de la circulación, bien en horario nocturno o cuando la visibilidad no es buena. Si el vehículo no incorpora sistema de alumbrado diurno, pueden emplearse en su lugar.

No ocurre lo mismo con las luces de posición traseras, ya que estas son un elemento de seguridad imprescindible cuando el vehículo está en marcha. De hecho, son la única referencia que permite que los demás conductores perciban que delante tienen a un vehículo que circula en su mismo sentido.

Y para los casos en los que la batería del vehículo no está en las mejores condiciones o el coche va a permanecer varias horas parado, una opción alternativa para estacionar en condiciones de baja visibilidad es recurrir a las luces de estacionamiento, con lo que reduciremos el consumo eléctrico del alumbrado en un 50%.